Si partimos del hecho de que son las comunidades el actor principal en la realización de las valoraciones con el fin de buscar reconocimiento para el logro de la justicia ambiental, entonces las formas de valorar deben trascender los problemas de distribución y adentrarse más a los problemas de reparación del daño moral o en otras palabras, a los problemas de reconocimiento. Una persona puede recibir una indemnización en dinero, a causa de un daño ambiental que haya sufrido, pero el daño en la subjetividad del ser seguirá persistiendo, si la acción no está acompañada de una decisión que garantice que esa persona no volverá a ser vulnerada en su integridad por el mismo hecho.

Para poder saber cómo reparar íntegramente, se deben hacer valoraciones también integrales, lo que significa que se debe saber qué tipo de daños materiales y también morales fueron ocasionados a la personas por los impactos ambientales. Luego de establecer estos dos tipos de daños, entonces se debe proceder a determinar las mejores formas para repararlos. Unas formas estarán dadas por estimaciones económicas, pero otras corresponden al orden de “hacer o dejar de hacer cosas”  por parte de los responsables. Por ejemplo, para reparar un daño por impactos ambientales, un juez puede determinar el pago de una indemnización acompañada de un perdón público y un compromiso de no volver a repetir la acción que generó el daño.

Estas diferentes formas de reparar, determinadas por un juez, que son “obligaciones o deudas”, para los responsables de los daños socioambientales, es lo que se configura finalmente como un pasivo ambiental. Puesto que las deudas se expresan en diferentes formas o lenguajes de valor y hacen referencias a diferentes naturalezas de daños ― no son solamente ecológicos (materiales) sino también socioculturales (morales)―, el concepto de pasivo ambiental es insuficiente. Por tal razón desde esta tesis, se construye un nuevo concepto de ”Pasivo Socioambiental Plural como obligaciones que se valoran pluralmente por hechos pasados de daños socioambientales”, transcendiendo la valoración meramente económica y dando cabida a otros tipos de valores como los socioculturales.

Para facilitar la ardua labor de la Valoración Plural de Pasivos Socioambientales, especialmente por parte de las comunidades vulnerables, se ha desarrollado el software MANU, el cual puedes consultar en este sitio.

El actor más objetivo para valorar los pasivos ambientales son las mismas comunidades afectadas por los impactos negativos a los ecosistemas. Para evitar sobrevaloraciones, los beneficiarios deben regirse a criterios técnicos, a la normatividad y al acompañamiento de organismos de control ambiental del Estado y de la academia que avale el carácter científico de las técnicas de valoración.

En este orden de ideas las valoraciones de pasivos ambientales por parte de la comunidades, son “cuentas por cobrar” a las empresas responsables de los daños,  que luego deben formalizarse en deudas o pasivos a través de un proceso de tipo judicial.

 Referencias

 Smith, A. (1776). An inquiry into the nature and causes of the wealth of nations: Volume One. London: printed for W. Strahan; and T. Cadell, 1776.

Pueden existir varios motivos para realizar estas valoraciones, pero si partimos del hecho de que son las comunidades afectadas por los daños ambientales, entonces la mayor motivación estará dada en el ámbito de la “justicia ambiental”. Lograr el ideal de la justicia ambiental, es algo más que solucionar un problema de distribución. Desde la teoría de la justicia ambiental, esta debe cubrir al menos tres aspectos: la distribución, el reconocimiento y la participación (Schlosberg, 2013).

Desde la teoría del reconocimiento intersubjetivo de Honneth, 2005, el “no reconocimiento” es la causa primaria de todas las injusticias. Puesto que se infiere de esta reflexión, que si se quiere llegar a hacer justicia ambiental, se tiene primero que “reconocer” a la victima de los impactos, como una persona igual en derechos y en su valor intrínseco.

Por consecuencia, si la valoración de los pasivos ambientales es utilizada por las comunidades para lograr la justicia ambiental, su principal aporte está dado en la medida en que sirva como vehículo para que las personas dañadas por impactos ambientes, sean reparadas en su integridad como personas de valor.

Referencias

Honneth, A. (2005). Reconocimiento y justicia. Entrevista Axel Honneth. Entrevista de Francisco Cortés Rodas. Revista Estudios Políticos, 27, 9–26.

Schlosberg, D. (2013). Theorising environmental justice: the expanding sphere of a discourse. Environmental Politics 22(1), 37-55.